lunes, 11 de enero de 2016

La imposibilidad de diseñar un juguete

Charles and Ray Eames, The Toy, 1951

Hace unos años, hubo una exposición en el MALBA (Argentina) llamada “La imposibilidad de diseñar un juguete” donde se hacía visible que un objeto determinado no se convierte en juguete por muchas vueltas que el diseñador haya dado en su creación, sino por la voluntad del que juega, pudiendo ofrecer tantas versiones como situaciones a las que sea capaz de amoldarse, todas ellas establecidas por la inventiva de aquel que decida darle uso.

Lo fascinante de éstos es que no importa tanto cómo o qué sean sino las posibilidades que puedan ofrecer. El diseño se hace subsidiario a la imaginación; son la base o la excusa para dar rienda suelta a la creatividad de los más pequeños. Por esta razón, los Eames decían que los juguetes no son tan inocentes como parecen ya que pueden ser los precursores de grandes ideas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario